Por: Gerardo Jair Jaime González
Si somos personas ajenas a las áreas de las ciencias forenses o al área empresarial, será muy difícil que hablemos de seguridad patrimonial y, en caso de buscar algo relacionado con el tema, encontraremos principalmente los siguientes tópicos:
- Seguridad y salud
- Seguridad industrial
- Seguridad y salud laboral
- Seguridad en las comunicaciones
- Seguridad social
- Seguridad informática, etcétera.
Es muy difícil que podamos encontrar un concepto específico sobre Seguridad Patrimonial.
Pero… ¿Qué es la Seguridad Patrimonial?
En los países de habla inglesa está bien establecida la diferencia entre “Security” y “Safety”, y no se tiene duda a qué se refiere cada una de ellas; sin embargo, en los países de habla hispana este, como muchos otros conceptos, se encuentra inmerso en una neblina que muchos decisores (concepto usado también en inteligencia policial) no son capaces de reconocer.
Ahora, simple y llanamente la Seguridad Patrimonial es el conjunto de medidas de protección adoptan las instituciones para prevenir riesgos y amenazas que puedan afectarlas. Otra definición consiste en que es la resultante de la adopción de una serie de previsiones tendientes a obtener efectos que demoren la detección de aquellos puntos vulnerables de nuestros objetivos por parte de agresores de todo tipo tanto reales como potenciales; dicho de manera sencilla, es la protección de los bienes y activos de una organización. Para tener esta protección, las organizaciones, bajo el liderazgo de un director de seguridad (decisor), analiza cuáles son los “puntos de oportunidad” y elabora un plan de seguridad. El plan de seguridad debe abordar la protección tanto de inmuebles (seguridad física), como los activos y las personas que trabajan para la institución.
Visto todo lo anterior, es importante resaltar que la Seguridad Patrimonial es un área preventiva dentro de la organización, donde se determinan qué medidas de seguridad son las más adecuadas para hacer frente a las amenazas y riesgos. Algunas de estas medidas consisten en control de accesos, un sistema de Circuito Cerrado de Televisión (CCTV), sistemas de protección contra incendios, ciberseguridad, etc.
Para cumplir con el objetivo de prevenir, la Seguridad Patrimonial se puede dividir en dos grandes aspectos:
- Aquellos que vuelven vulnerable a la organización.
- Las actividades a tomar en consideración para neutralizar o reducir los efectos del punto anterior.
Estos aspectos se vuelven cada vez más complicados, ya que la complejidad de los riesgos y amenazas que pueden afectar a los activos se incrementa cada día y el personal asignado a esta función es cada vez menos, eso sin considerar que no siempre se cuenta con los recursos para poder generar un adecuado plan de seguridad.
Por último, los tipos de riesgos que puede tener la organización pueden ser de distintos tipos, ya que cada institución es vulnerable de una u otra manera. Los riesgos que podemos encontrar con mayor frecuencia son los siguientes:
- Personas: todo el personal que se encuentra dentro de las instalaciones de la organización puede ser o correr un riesgo, por ello la Seguridad Patrimonial debe garantizar planes de prevención y control de amenazas intencionales o accidentales. Un ejemplo claro es cuando se produce un sismo, se deben tomar pertinentemente las acciones para que no haya víctimas.
- Bienes e instalaciones: las organizaciones se encuentran en riesgo permanente de ser robadas, destrozadas, tener sabotajes, incendios, entre otros, que pueden dañar las instalaciones. Las medidas de seguridad preferidas por las empresas son: tener cámaras de vigilancia, controles en los accesos, bardas perimetrales, protección contra incendios, etc.
- Acceso a la información: Sabemos perfectamente que “la información es poder”, por lo cual la información es un activo determinante en el funcionamiento de la organización, es innegable que hoy en día la información se trasladó a mecanismos tecnológicos para los cuales se debe tener cierto tipo de protección que se aborda en el siguiente punto; sin embargo, la mayoría de las empresas tiene respaldo de manera física lo cual implica tener una sala con información confidencial y cerrarla con puerta acorazada o el acceso debe ser biométrico.
- Ciberseguridad: Las empresas deben contar con mecanismos de seguridad que les permita hacer frente a los ataques cibernéticos.
- La reputación: Este punto en muchas ocasiones es menospreciado; sin embargo, es otro de los principales activos que necesita protección, ya que por actos antisociales o errores de la propia organización, puede echar abajo años de trabajo. La Seguridad Patrimonial puede adoptar determinadas medidas para contribuir a preservar la imagen de la empresa.
Bibliografía consultada:
- Aguirre Martínez, E. Seguridad y protección. Trillas. México
- Hurtado, H. Oficial de Seguridad Privada. Proceso de Desarrollo y Mejora Continua en la Seguridad. Publicación independiente. México
- García Diego, J. Guía de buenas prácticas en la seguridad patrimonial. AENOR ediciones. México